El paciente adulto a veces se pregunta si puede llevar ortodoncia. La respuesta es claramente: Sí. La verdad es que un 40-45% de nuestros pacientes son adultos. Tenemos experiencia en pacientes afectados por enfermedad periodontal, con dientes móviles, que tras el adecuado manejo de sus problemas (periodontal y ortodóncico) logran una corrección funcional y estética de su maloclusión, con dientes más fijos que cuando comenzaron. Tenemos pacientes con más de 15 años post-ortodoncia que pensaban que iban a perder todos los dientes y aún los conservan. Lo que también es cierto, es que los pacientes adultos y los afectos de piorrea en particular, presentan una serie de peculiaridades que hay que manejar con cierta precaución. Vamos a comentar algo sobre ellas:
-Condicionamiento social y laboral: aún hoy día, existe un cierto prejuicio sobre un adulto usando aparatos de ortodoncia. La estética del aparato suele ser un problema para el paciente de ortodoncia adulto. “Yo ponerme aparatos a la vejez…”, “Me da vergüenza que se me vean con aparatos…”. La solución a estos problemas pasa por el empleo, siempre que sea posible, de la ortodoncia plástica, donde los aparatos son confeccionados en plásticos especiales, de aspecto trasparente o la ortodoncia lingual, en la que loa aparatos, metálicos, son cementados en la caea posterior de las piezas dentarias. Otros problemas como pueden ser los horarios laborales, los manejamos ofreciendo un horario amplio de atención, en mañana y tarde, todos los días laborables de la semana.

-Características biológicas: la mecánica ortodóncica en el paciente adulto, tiene aspectos técnicos que lo diferencian de la ortodoncia del niño y adolescente. No existen plasticidad ni crecimiento óseos. Pueden haber problemas periodontales de base, retracciones de las encías, prótesis fijas y falta de piezas dentarias. A veces el paciente desea mantener sus prótesis. Ello implica limitaciones en estos tratamientos y a veces un cierto reto para el profesional. Pero no digo que no sea factible.
-Paciente que desea reponer las piezas dentarias perdidas. Es evidente la mala alineación y encaje dentarios. Se le propone tratamiento de ortodoncia previo a la rehabilitación protésica futura. Este es un caso favorable, porque el paciente aún no tiene colocadas las prótesis. El resultado protésico será mucho mejor si antes se corrige su maloclusión dentaria. Caso típico es la presencia de un hueco (extracción de un molar hace muchos años) que es insuficiente para colocarle una pieza dentaria protésica (no cabe) y es desfavorable para plantear su cierre ortodóncico. En estos casos, lo mejor es preparar ortodóncicamente un espacio adecuado para la futura colocación sin problemas de la pieza protésica del tipo que sea (implante por ejemplo).
La falta de un diente (de nacimiento) o la pérdida de una pieza dentaria es una situación que requiere (en nuestra práctica clínica) de la preparación ortodónica a fin de obtener el mejor resultado estético y funcional de la solución protésica elegida.
La calidad de la restauración protésica va a ser mucho mejor, va a tener mejor estética y función y periodontalmente resultará más favorable.